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"Delante de nuestros ojos se está desarrollando un centro de la jihad global a una escala que podría afectar no solo a Siria y a las fronteras del Estado de Israel, sino también a Jordania y al Sinaí", expresó en una ceremonia de graduación de oficiales de inteligencia.

"Siria es nuestro principal enemigo", apuntó Kochavi, "y se está convirtiendo un centro regional de los jihadistas – que también son enemigos de Israel".

En abril pasado, Jabhat al Nursa, un grupo extremista islámico que combate a Assad en Siria, anunció su fusión con el "Estado Islámico de Irak y el Levante", el brazo de Al Qaeda en Irak, y que estaba recibiendo órdenes de Ayman al Zawahiri, quien reemplazó a Osama bin Laden, en la dirección de Al Qaeda.

Hace dos semanas, la cadena británica BBC informó que representantes del Talibán Pakistaní visitaron Siria para establecer una base y evaluar la "necesidad de la jihad".

El aparato de seguridad de Israel estima que a pesar de las recientes victorias del ejército de Assad, la guerra civil está lejos de finalizar. Los rebeldes controlan varias zonas de Siria, incluyendo ciudades claves como Homs y Alepo.

Cientos de jihadists se han establecido en el la parte sur del Golán sirio. En este sentido, Israel renovó los trabajos en la valla fronteriza con Siria, y espera finalizar las obras el mes que viene. Además, ha reforzado la presencia militar en la zona por temor a que esos jihadistas traten de infiltrarse en el país o perpetrar un ataque terrorista.

Mientras tanto, el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, general Martin Dempsey, escribió en una carta a dos senadores norteamericanos que el establecimiento de una zona de exclusión aérea para proteger a los rebeldes sirios precisaría cientos de aeronaves, costaría más de mil millones de dólares mensuales, y no aseguraría que cambie el impulso de la guerra civil. 

Israel refuerza sus defensas en la frontera con el Sinaí 

"No pasa un día que no escucho un informe sobre un ataque terrorista en el Sinaí, y nuestra preocupación es que esas armas se vuelvan en contra nuestra", expresó el ministro de Defensa, Moshé Yaalón, durante una visita a la frontera israelí-egipcia.

Yaalón realizó estas declaraciones durante una visita a una batería del escudo antimisiles Cúpula de Hierro (Iron Dome o Kipat Barzel) desplegada en la ciudad sureña de Eilat.

El ministro de Defensa manifestó que desde la caída del ex presidente Mohamed Morsi, el ejército egipcio ha incrementados sus esfuerzos para contrarrestar a los terroristas que aprovecharon el vacío de seguridad en la península del Sinaí, desde el derrocamiento de Hosni Mubarak.

"Estamos viendo una actividad mucho más efectiva por parte del ejército y las fuerzas de seguridad egipcias allí, en los últimos meses, y principalmente en las últimas semanas, tras el cambio de gobierno".

"Hemos fortalecido nuestro despliegue en la frontera, y emplazado una batería del escudo antimisiles Cúpula de Hierro aquí en Eilat, en caso de que alguien se atreva a disparar a la ciudad. 

Lo hicimos para proteger a los habitantes de la ciudad y para hacer que la vida aquí sea más segura y siga siendo lo más normal posible".

Oficiales de defensa evaluaron que dada la ofensiva egipcia en el Sinaí, es probable que los grupos terroristas allí traten de demostrar su capacidad de supervivencia y desafío, bombardeando el territorio israelí.

Yaalon puso de relieve que las fuerzas egipcias que ingresaron en el Sinaí como parte de la campaña para reprimir al terrorismo islámico en la región, lo hicieron con la aprobación de Israel, en conformidad con el apéndice militar del tratado de paz firmado entre ambos países. "Nosotros autorizamos (la entrada de las fuerzas egipcias) porque son utilizadas realmente para combatir el terrorismo. El proceso durará probablemente más de lo que nos hubiera gustado", expresó.

El titular de Defensa también se refirió a la decisión de la Unión Europea de incluir al brazo armado de Hezbollah en su lista de organizaciones terroristas. "Más vale tarde que nunca", aseveró, "Aunque desde nuestro punto de vista no hay ninguna diferencia entre las alas políticas y militares [de Hezbollah]. La orden de activar el terrorismo la da el ala política. Espero que los europeos finalmente se den cuenta también de eso".

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