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El portavoz del Pentágono, George Little, afirmó que el avión no tripulado realizaba un "vuelo rutinario de vigilancia" cuando fue disparado el pasado 1 de noviembre.

La aeronave estadounidense se encontraba a unos 25 kilómetros de la costa iraní cuando fue interceptado por un avión de Irán SU-25 que abrió fuego, explicó Little en una rueda de prensa, y agregó que no había sido derribado.

Tanto el secretario de Defensa como funcionarios de seguridad de la Casa Blanca fueron informados poco después del incidente, aunque se mantuvo en secreto porque la misión de reconocimiento en el Golfo Pérsico era "clasificada".

"Nuestra hipótesis de trabajo es que dispararon contra la aeronave para derribarla", dijo el portavoz del Pentágono.

Se trata de la primera vez que Irán dispara sobre un avión no tripulado de Estados Unidos.

Little precisó que Estados Unidos informó posteriormente a Irán de que seguirían llevando a cabo vuelos de vigilancia en espacio aéreo internacional.

La revelación del Pentágono se produce el mismo día en que EE.UU. anunció nuevas sanciones económicas contra individuos e instituciones iraníes por censura, abusos contra los derechos humanos y apoyo a grupos terroristas en la región. 

EFE/AURORA