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El Senado argentino empezará a debatir este miércoles el memorándum de entendimiento sellado entre Argentina e Irán para "esclarecer" el atentado contra el centro comunitario judío AMIA en 1994 en medio de una fuerte polémica por la anunciada negativa iraní a permitir el interrogatorio de sospechosos.

El acuerdo, que no entrará en vigor hasta que sea ratificado por los Parlamentos de los dos países, será discutido el miércoles, por un plenario de comisiones del Senado y, de obtener un dictamen positivo, pasará a la Cámara Alta, donde el oficialismo tiene mayoría.

El canciller argentino, Héctor Timerman, estará presente en el Senado, según confirmaron fuentes de la Cancillería.

También asistirán dirigentes de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) y de familiares de las víctimas del atentado.

Semanas atrás Timerman dijo que el actual ministro iraní de Defensa, Ahmad Vahidi, "figuraría entre los indagados", pero hoy el portavoz del Ministerio de Exteriores de Irán, Ramin Mehmanparast, desmintió que los sospechosos iraníes serán interrogados por jueces argentinos.

El desmentido iraní ha subido el tono de las críticas y desde la oposición han exigido la dimisión inmediata del canciller.

Para el diputado nacional por el Frente Peronista Eduardo Amadeo, la presidenta argentina, Cristina Fernández, "debe pedir ya mismo la renuncia a este peligroso canciller" por el "papelón que representa la declaración de la Cancillería iraní sobre el 'histórico acuerdo' con Irán por la causa AMIA".

Desde la Unión Cívica Radical, el principal partido de la oposición, el senador Gerardo Morales adelantó que su bloque votará en contra, porque "el acuerdo es un verso (un cuento, algo falso), no garantiza de entrada la indagatoria de los imputados".

"Timerman le mintió en la cara a toda la comunidad judía", criticó Morales.

El presidente de la (DAIA), Julio Schlosser, opinó que "el Gobierno (argentino) actuó de buena fe para destrabar la investigación", pero señaló que hoy ha vuelto a demostrarse "que Irán no es un interlocutor válido".

Schlosser dudó de la veracidad de las declaraciones de Mehmanparast, pero a su juicio significan que "Irán se niega a los interrogatorios" y "si no hay interrogatorio no hay acuerdo", sentenció.

Los titulares de la AMIA y la DAIA instaron a los legisladores argentinos a "continuar con la tradición democrática argentina, sosteniendo sus valores y rechazando el mencionado acuerdo", que consideran que "implica un grave retroceso en la búsqueda de justicia por los atentados".

Fuentes de la Cancillería argentina declararon que la negativa a los interrogatorios "fue desmentida por el ministro de Exteriores iraní", Ali Akbar Salehi, durante un viaje a Moscú.

Salehi aseguró que el Gobierno iraní "adhiere plenamente a las disposiciones del acuerdo sobre el caso AMIA", según una nota difundida por la agencia oficial iraní IRNA, pero evitó mencionar si permitirá o no el interrogatorio de Vahidi y otros siete sospechosos iraníes.

El presidente de la Cámara de Diputados, el oficialista Julián Domínguez, minimizó la postura de Irán y afirmó en declaraciones radiales que "lo que hagan otros, es problema de otros".

"Argentina va a agotar todos sus esfuerzos para poder esclarecer el atentado terrorista más horroroso del cual tengamos memoria como pueblo argentino", añadió Domínguez.

El memorándum de entendimiento fue firmado el pasado 27 de enero en Adis Abeba por los cancilleres de Argentina, Héctor Timerman, y de Irán, Ali Akbar Salehi.

El atentado contra la sede de la AMIA, en el que fueron asesinadas 85 personas, fue el segundo contra objetivos judíos en Buenos Aires, donde en 1992 mediante una bomba que explotó frente a la embajada de Israel, fueron asesiandas 29 personas.

La comunidad judía atribuye a Irán y al grupo terrorista chií libanés Hezbollah la planificación y ejecución de ambos atentados.

EFE/AURORA